JUGAR CON FUEGO

-¡Hola! ¿Cómo andas mi amor?

- De diez como siempre.

-Me contaron que perdiste a alguien muy querido.

-Así es. Tenés razón. Es uno de mis mejores amigos del alma. Me dio un brazo grande, grande, como era él y de dijo,” No te hagas problemas, que todo va a ir bien” ¡Mi vida! Estoy segura que él sabía que serían sus vacaciones largas. Muy largas. Físicamente no iba a volver.

Me dejo sus sabias palabras, sus gestos, cariños y sonrisas de niño, que nunca perdió. Además de piezas musicales, que cuando las escuche, seguro va estar  él junto a mí. Es más, a veces hablamos sobre lo poco preparado que estamos o están, algunos, para aceptar la partida. “Es natural. Son ciclo. Se cumplen y chau” ¡Un dulce! ¡Qué agallas! ¡Que serenidad! La que da, el saber que nunca hiciste daño a nadie ¿¡Quizás, es eso!? Digo yo.

Sí lo recuerdo con pena, él estaría muy enojado conmigo. Y no es lo que quiero precisamente.

Bueno, pero no fue solo eso.

-No. Se han alejado bastantes este año. De muy distintas formas, físicas y… de las otras.

- ¿A estos últimos, le habrás reprochado algo; dicho quizás?

-¿Reprochar? No, no soy quien. Probablemente les di mi opinión y no les gusto.

Vos sabes, porque no me conoces de ayer. Doy mi vida, pongo el pecho, por la vida de mis seres queridos y por los demás. Y sabes, que siempre te he dicho,  que la Tierra no es el Edén, la Tierra es la Tierra. Hay vida. Existencia. No es un juego. El amor es fuego, pero no te achicharra.

-Pero te consume.

- No lo creo así. No sé… Para mí el amor es sano, es paz, alegría, es amor… ¿entendés? El no da, ni siente dolor. Es… un estado especial. Pensá. La justicia hecha con amor, para el ser humano, dejaría de ser “Dura es la Ley, pero es Ley”. Hace miles de años que el hombre dice buscar el equilibrio, y sostiene los platillos de la balanza, una espada. No con la fuerza el amor. La política, otro tanto igual. Derroche de proyectos… y demás. Sin irnos muy lejos… 2000, 400, 100 años. Si, alguna cosas han cambiado, tampoco soy ciega, pero se equilibraron ¡No! Cada vez más pobres, más hambre, más pestes, más y más… Y el que está arriba, no baja. Es al ñudo, como dice el hombre de campo. Puede saber la totalidad de una cosa… Le falta saber un poco de cada una, ver la paleta, con todos los tonos, sabes. Mira a donde fue a parar nuestra charla ¡Dios mío! ¿No tiene sentido? Sí lo tiene. Él luchaba por la igualdad.

Y ya que estamos. El que esperamos, hoy a las 24 en punto, llegó hace 2014 años. Nos trajo y dejo este mensaje “AMAOS LOS UNOS A LOS OTROS COMO LOS AMO YO” Él sí que bajo y estuvo entre los humilde… y dio la vida. Sabía que ese era su final, y no se achico. Dejó una lección de vida, de amor.

¿Tomamos la posta?, sabemos cómo empieza, no cuando termina, pero si el final EL AMOR, LA PAZ, y… todo lo demás.

-¿Estas enojada al final?

-No. No  lo estoy ¡Jamás! Pero la vida, no es para jugar. Como no lo sos vos para mí, sabes muy bien que los amo y mucho. Espero que se hayan cumplido tus deseos. Te mando a vos y al bonachón del Negro, una lluvia de estrellas…

- ¿No un abrazo de luz?

- Sos terrible. Un gran abrazo de luz.

LATIDOS ENTRE VOS Y YO: Por un mundo mejor. Sola/o no podemos. Te necesitamos a vos ¿Te unís?